Quiero compartir con ustedes una síntesis del trabajo con una consultante a quien acompañé en el camino del autoconocimiento desde una perspectiva astrológica.
Aprovechando el fin de año hicimos juntas una evaluación del trabajo de seguimiento de su Carta Natal que venimos realizando desde hace aproximadamente 2 meses. Mi consultante tiene 56 años y está en un momento astrológico que implica grandes cambios personales que la reposicionarán en el mundo o se encontrará con muchas situaciones de destino que pueden ser vividas como dolorosas, inexplicables, buscando responsabilizar a otros de lo que sucede: todo dependerá de que pueda o no entender acerca de este ciclo que debe ser inevitablemete transitado y que de acuerdo a cómo lo transite, dejará huellas y consecuencias dolorosas o la alegría de ver las posibilidades que, a partir de las dificultades, se abren para encarar esta segunda parte de su vida contando con nuevos recursos personales.
Transcribo ahora las palabras de mi consultante:
“A partir del trabajo que venimos haciendo puedo ver la diferencia entre éste y otros trabajos que sobre mí misma encaré durante muchos años de mi vida. Hasta comenzar a trabajar mi Carta Natal me sentía aislada como individuo, y a partir de un trabajo con perspectiva astrológica me siento ubicada en el mundo, en el Universo. Puedo comenzar a ver cual es el lugar que me tocó, darme cuenta de que lo que me está pasando tiene un sentido, que no estoy sola en el mundo y que lo que me sucede, y lo que soy pertenece a un sistema más amplio. Vos al comenzar me dijiste algo que me resultó muy claro: “no te voy a decir lo que te va a pasar sino que te voy a acompañar en el camino de tu evolución para que seas más conciente de tus energías y recursos personales potenciales”. Hoy me siento más segura de lo que hago. Siento que todo tiene un sentido, que hay un camino que es “mi camino”, y que la astrología te marca los momentos, te da otra explicación. Me siento una con el universo, me siento más cómoda, que todo tiene un sentido con lo lindo y con lo feo, con lo doloroso y con las alegrías, con lo duro y con lo gratificante. Verme en el cuadro familiar para mi fue un alivio que me sacó de la culpa solitaria. Solté las riendas, no tengo nada que manejar, sé que van a venir tiempos difíciles y estoy preparada para eso: ya no necesito sostenerme en otros. Conocer mi carta natal me da puntos de referencia que me sostienen”.
Muchas veces, cómo profesionales, nos ponemos objetivos o metas en nuestro trabajo que no siempre tenemos posibilidad de comprobar con tanta claridad y las expresiones de mi consultante, que hoy he compartido con ustedes me hacen reflexionar acerca de la sintonía entre los logros de mi consultante y el objetivo que persigo en mi tarea como Astróloga.
Lic. Alicia Mabel Alfuso