La adolescencia constituye una etapa de la vida en la que se suceden una serie de cambios a nivel físico, mental, emocional, espiritual y social. Algunos de los cambios tienen que ver con lo corporal, lo sexual, las relaciones amorosas, los grupos de pertenencia.
No podemos determinar con precisión el tiempo o edad que dura la adolescencia, pero si sabemos que hoy va según el caso 10 a los 30 años ó más. Podemos encontrar las causas de esta prolongación en edad en la inseguridad, las dificultades económicas, la falta de proyecto, la falta de trabajo, las metas no claras. Todo ello hace que se retrase el pasaje a la edad adulta., muchas veces favorecido por los padres por su comportamiento sobreprotector frente al miedo que les provoca la realidad.
Para algunos adolescentes se trata de una época dolorosa por sentirse desubicados y vulnerables. Se preguntan en esta etapa: ¿quién soy?, ¿quién quiero ser?, ¿adónde quiero ir?, ¿qué espero de la vida?.
Aunque aparenten seguridad en sus actitudes y comportamientos, se sienten tremendamente inseguros. Por un lado, necesitan alejarse de sus padres y del ambiente familiar en el que hasta ahora se desenvolvían para salir a la calle y encontrar su propia manera de actuar, de relacionarse, de sentirse adulto. Por otro lado, siguen siendo niños que necesitan protección y alguien que les señale, al menos, el camino que deben seguir y los límites que existen.
Es una etapa de desmitificación de los padres y búsqueda de modelos identificatorios ideales en búsqueda de construir su propia identidad. Por eso resultan muy críticos y duros con sus padres.
El cuerpo es algo que centra gran parte de su atención. Cuerpo perfecto que nunca consiguen, debido al ideal tan alto que se ponen. Se ven defectos. Es la edad del "demasiado", demasiado alta, demasiado bajo, demasiado gordo, demasiado flaca, demasiados granos...
Son algunas emociones asociadas a esta etapa: el aislamiento, la irritación, la ira, la tristeza, la depresión o la euforia, la provocación, la autoagresión, la mimetización, la crítica y la autocrítica, el sentirse feo y discriminado, la frustración, la omnipotencia, la intolerancia.
Muchas veces esto se traduce en adicción a las drogas, alcoholismo, bulimia y anorexia, embarazos no deseados, la violencia con sus pares, padres o maestros, comportamientos arriesgados, rebeldía aparentemente sin causa para los padres, autoagresión, mimetización con amigos o grupos de riesgo, dificultades escolares, obesidad, falta de integración, entre otras.
Es importante trabajar en cada crisis conforme va apareciendo y saber que si los tomamos a tiempo quedará sólo en ese, en una crisis.
Es aconsejable nos solo entrevistar al adolescente sino tener algunas entrevistas con los padres para que ellos comprendan mejor lo que le sucede a su hijo y poder de esta manera mejorar la comunicación y el vínculo.
Las emociones desarmonizadas son las que, de no tenerse en cuenta comienzan a enfermarnos.Los remedios florales tienen la cualidad de elevar nuestras vibraciones energéticas y abrirnos a la recepción del yo espiritual; de esta manera la Naturaleza, con su virtud particular, nos libera de lo que es la causa de la enfermedad. No hay verdadera curación si no hay cambio de perspectiva, paz espiritual y felicidad interior.
Los remedios florales ejercen una influencia notable sobre la personalidad y ayudan al bienestar general independientemente de la estructura caracterológica del individuo, pues serán eficaces aún cuando la persona no crea en su acción benéfica e independientemente del nivel de evolución de su conciencia, y su efecto puede ser aumentado sensiblemente mediante el trabajo conciente, lo que implica un trabajo terapéutico en el que la persona comprenda el proceso que lo ha llevado a su enfermedad y acompañe el proceso de su sanación.
La Terapia Floral del Dr. Edward Bach es justamente eso "una terapia" en la que se incluye los preparados florales. Es imprescindible el diálogo entre terapeuta y consultante, direccionado a la comprensión y superación de los sentimientos y emociones negativas que lo tienen anclado en la presente dificultad.
Lic. Alicia Mabel Alfuso