¿Qué significa ser de Piscis?
En el momento en que el Sol está transitando por la constelación de Piscis, quienes nacen o cumplen años entre el 20 de febrero y el 21 de marzo, según nuestro horóscopo, son de Piscis o dicho de otra manera tienen el Sol en Piscis.
El signo anterior, Acuario, tenía que ver con una energía de discontinuidad, intermitencia, donde nada es constante, de aquello que es original, de lo que ocurre una sola vez; lo imprevisto e irrepetible.
Con Piscis entramos en la energía pura, más allá de las formas. Todo está en relación con todo, cada partícula resuena infinitamente con las demás.
Piscis es el último signo del zodíaco y tiene que ver con la muerte, no física sino con la disolución del yo, con soltar aquello que nos mantiene unidos a las formas y nos conecta con un sentido de unidad profunda.
Desde el punto de vista de la forma, Piscis es el caos. Aquí desaparece la posibilidad del borde y del límite.
Piscis tiene que ver con el silencio y desde aquí podemos comprender lo difícil que es explicarlo con palabras.
Desde otros signos podemos decir que Piscis es caótico, pero si apelamos a lo sensible podemos encontrar un orden profundo e invisible que subyace al universo visible.
El inconsciente profundo es pisciano. Los sueños parecen caóticos aunque tienen una lógica propia, accesible solo a través de nuevas formas de simbolización.
La energía de Piscis nos propone contactarnos con realidades difíciles de traducir a la vida cotidiana, generando hipersensibilidad y percepción sutil. Esto puede causar caos y desorden en quienes aún no tienen estructura psíquica desarrollada.
Se observan dos tipos de piscianos: los colgados, desordenados y confundidos, y los obsesivos, hiperordenados, hiperracionales e hiperrígidos. Ninguno de los dos vive plenamente la energía de Piscis, ya que los “dos peces” deben integrarse: uno representa lo sensible y espiritual, el otro lo concreto y racional.
Actividades piscianas incluyen servicio, arte, música, generación de imágenes, psicología de los sueños, cuidado de otros y todo lo relacionado con mundos sutiles y lenguajes sagrados.
La falta de forma que propone Piscis puede llevar a problemas de piel y alergias, así como al abuso de drogas o alcohol.
El aprendizaje de Piscis consiste en desarrollar discernimiento, encontrar límites sin perder sensibilidad y empatía, distinguiendo el cuerpo propio del colectivo. Piscis rige los pies, conectando con la humildad y la entrega.
Su regente es Neptuno, Dios de los océanos.
Cuando hablamos de energía pisciana no solo nos referimos a los nacidos entre el 20 de febrero y el 21 de marzo, sino también a quienes tienen la luna o el Ascendente en Piscis, planetas en Piscis o Sol aspectado con Neptuno.
Todos ellos verán teñida su personalidad por estas características.
Es importante recordar que una persona no tiene solo las características de su signo. Para conocer sus energías y psicología, así como sus tendencias y necesidades de aprendizaje, es necesario un estudio de su Carta Natal, que permitirá al astrólogo visualizar aspectos en luz y sombra, siendo estos últimos los que, de no ser reconocidos, actuarán como “destino”.
Lic. Alicia Mabel Alfuso